En el sistema de nuestro CCC sólo la ley puede crear privilegios; y esto es así dentro de la formalidad de nuestro sistema legal, indiscutible; pero hay otras formas o fuentes para crear privilegios que exceden lo puramente formal, esto es, en la Argentina, los privilegios que crea el sistema político para su conservación, financiamiento y regeneración tienen vigencia sin necesidad de reconocimiento judicial alguno.
Por ejemplo, en el combate a la narco criminalidad, una forma eficiente está resultando ser el control de las remesas de dinero y la limitación y complejización de sus fuentes de financiamiento.
O sea, si se limita el financiamiento se limita el delito.
Financiamiento es, en muchos casos, la razón de supervivencia de muchas actividades ilícitas. Lo que hoy están discutiendo los legisladores en la Argentina, NO ES como se va a financiar el sistema de jubilaciones y pensiones, sino como se va a financiar el sostenimiento del sistema político que nos ha traído hasta aquí. En efecto, hace ya bastantes años que la Argentina “desapareció del radar” que observa a los países a los que conviene dirigir la inversión. Para comprender el fenómeno hay múltiples razones, o “multicausal” como suelen decir aquellos que no quieren mencionar a la razón fundamental y determinante. Esa razón es, el sostenimiento de un sistema político privilegiándolo sobre un programa de desarrollo y beneficio para el país. En efecto, cuando se habla de que se necesita “seguridad jurídica”, ¿qué es lo que se está reclamando?, ¿ solamente que se cumpla con lo establecido contractualmente?, ¿o también que existan condiciones de normalidad que permitan el cálculo económico?, esto es condiciones de normalidad en el entorno socio económico que permitan realizar las proyecciones y los resultados de un determinado proyecto. De existir estas condiciones, los actores económicos puede recurrir al endeudamiento, esto es contar con el apoyo del capital de terceros que le den volumen al proyecto que se quiere desarrollar y para el que el capital propio es insuficiente. Para recurrir al capital de terceros se requieren entre otras condiciones una estabilidad de entorno que no afecte la viabilidad del proyecto.
Hay muchos métodos para poder evaluar si un proyecto es rentable o no y si es susceptible de recurrir al endeudamiento para llevarlo a cabo.
Para ello, hay algunos métodos como el VAN (valor actual neto) o la TIR (tasa interna de retorno), que permiten analizar si el flujo de fondos futuros que generará el proyecto, al final del mismo permitirá o no el repago del crédito tomado. Así de simple. De esta manera los flujos de capital se orientan hacia donde estas condiciones están dadas, y el sostenimiento de estas condiciones hacen que el proceso de inversión crezca y se retroalimente con el capital de terceros. Así funciona.
La comparación entre países que muestra el retroceso relativo de la Argentina se puede analizar desde el punto de vista de la imposibilidad de realizar un cálculo económico racional y poder desarrollar proyectos con el aporte de capital de terceros. ¿ Porqué no se hace?, ¿ porque se demora tanto algo que es moneda corriente en el mundo actual? Simplemente porque al poder político (la “casta” en la denominación corriente de estos días), no le conviene, porque en condiciones normales de estabilidad para permitir el cálculo económico, perdería la omnipotencia de la discrecionalidad que detenta su poder.
Así la posibilidad de gastar en exceso y según su interés, desarrollar obras y proyectos a su criterio , modificar variables como la tasa de interés o el tipo de cambio, son limitantes determinantes para todo aquel que tenga un proyecto viable y para desarrollarlo necesite del capital de terceros.
El sistema actual, y que es lo que se está discutiendo, es si la enorme riqueza que genera y es capaz de generar la Argentina va a seguir siendo administrada como lo ha sido hasta la actualidad con el argumento de “el Estado presente”, o bien se transforma en un sistema donde la racionalidad permita que el desarrollo, la inversión, etc, pase a manos que sean capaces de utilizar todos los mecanismos racionales que lícitamente conduzcan al crecimiento.
Dr. Oscar Palomba