Digitalización en la Unión Europea y su importancia para el Comercio Internacional – Dr. Alfredo Collosa

Recientemente se publicó el informe “Digitalisation in the European Union: Progress, challenges and future opportunities”[1] la cual contiene importantes conclusiones en diversos aspectos tales como el comercio internacional.

La Encuesta del Grupo EIB sobre Inversiones y Financiamiento de Inversiones (EIBIS) es una encuesta anual única de unas 12 800 empresas.

Comprende empresas de todos los estados miembros de la UE, así como una muestra de empresas estadounidenses que sirve como punto de referencia.

Recopila datos sobre las características y el rendimiento de las empresas, actividades de inversión pasadas y planes futuros, fuentes de financiación, problemas de financiación y otros desafíos.

Entre sus principales conclusiones se destacan las que siguen.

1. DIGITALIZACIÓN EN LA UNIÓN EUROPEA

La crisis del COVID-19 empujó a las empresas europeas a digitalizarse. Más de la mitad de las empresas de la UE, el 53 %, dijo que tomó medidas para volverse más digitales, por ejemplo, brindando servicios en línea.

Si bien las empresas europeas obtuvieron grandes ganancias, la proporción de empresas que invirtieron en digitalización como respuesta a la pandemia fue aún mayor en los Estados Unidos.

La brecha proviene principalmente de las micro y pequeñas empresas de la UE, que tenían menos probabilidades que sus pares de EE. UU. de haber invertido en volverse más digitales.

Solo el 30% de las microempresas en la Unión Europea dijeron que tomaron medidas para mejorar la digitalización en 2022, en comparación con el 63% de las grandes empresas.

Sin embargo, la Unión Europea ha estado cerrando la brecha con los Estados Unidos en la adopción de tecnologías digitales avanzadas en los últimos cuatro años.

El 69 % de las empresas de la UE implementaron tecnologías digitales avanzadas en 2022, en comparación con el 71 % en los Estados Unidos. La brecha se ha reducido desde 2019.

2. INNOVACIÓN Y DIGITALIZACIÓN

El acceso a servicios de Internet de alta velocidad, una fuerza laboral calificada y entornos innovadores estimulan la digitalización.

Las empresas ubicadas en regiones con mejor infraestructura también obtienen mayores beneficios al invertir en digitalización.

Siguen existiendo diferencias importantes y persistentes en la infraestructura digital entre las regiones de la UE.

Las regiones con velocidades de Internet más rápidas tienden a tener una mayor proporción de empresas digitales. La infraestructura digital también desempeñó un papel fundamental durante la crisis de COVID-19.

El 14 % de las empresas de la UE encuestadas en EIBIS considera que el acceso a la infraestructura digital, es decir, el acceso y la velocidad de Internet, es un obstáculo importante para la inversión.

El entorno en el que operan las empresas también marca la diferencia. Las empresas que trabajan en entornos altamente innovadores digitalmente tenían más probabilidades de invertir en digitalización como respuesta a COVID-19.

Al mismo tiempo, las regiones altamente innovadoras digitalmente y las regiones más débiles no muestran diferencias significativas en el uso de tecnologías avanzadas.

Esto sugiere que, si bien el entorno innovador puede haber desempeñado un papel en el fomento de la transformación digital durante la pandemia, la adopción de tecnologías digitales avanzadas no depende necesariamente de la ubicación. Hay otros factores en juego.

3. HABILIDADES DIGITALES DE LOS TRABAJADORES

La digitalización de las empresas también depende de la disponibilidad de trabajadores con habilidades digitales.

Las empresas en regiones donde la población tiene habilidades digitales por encima del promedio tienen más probabilidades de haber implementado tecnologías digitales avanzadas.

Esas empresas invirtieron con más frecuencia en mejorar su digitalización durante la crisis de COVID-19.

Para aprovechar plenamente los beneficios de la digitalización, las regiones deben mejorar los sistemas de educación y formación para actualizar constantemente las habilidades de los trabajadores, así como proporcionar aprendizaje en línea para los grupos actualmente excluidos de la economía digital.

El 59% de las empresas se volvieron más digitales como respuesta al COVID-19 en regiones con altas habilidades digitales, en comparación con el 43% en regiones con bajas habilidades digitales.

4. CAMBIO CLIMÁTICO Y DIGITALIZACIÓN

Las tecnologías digitales emergentes podrían desempeñar un papel importante para abordar los desafíos ambientales.

Ejemplos de tales tecnologías son la movilidad urbana inteligente, la agricultura de precisión, las cadenas de suministro sostenibles, el monitoreo ambiental y la predicción de desastres.

Las tecnologías digitales también podrían ser fundamentales para monitorear el cambio climático y facilitar el cambio tan necesario hacia una economía circular.

Además, las empresas digitalmente avanzadas tienden a invertir más a menudo en la lucha contra el cambio climático.

Las empresas digitales informan con mayor frecuencia que ya han invertido y planean invertir más en la adaptación al cambio climático y en la reducción de sus propias emisiones.

El 61% de las empresas digitalmente avanzadas ya invirtieron en medidas contra el cambio climático, en comparación con el 36% de las empresas no digitales.

5. COMERCIO EXTERIOR Y DIGITALIZACIÓN

Es más probable que las empresas que participan en el comercio internacional utilicen tecnologías digitales avanzadas o desarrollen sus negocios en torno a dichas tecnologías.

También es más probable que las empresas digitales actúen de manera concreta para abordar los efectos adversos de las perturbaciones comerciales.

En términos más generales, la digitalización aumenta la resiliencia de la economía ante grandes impactos inesperados.

Los exportadores e importadores tienen más de 10 puntos porcentuales más de probabilidades de adoptar tecnologías digitales avanzadas que los no comerciantes.

La diferencia para las empresas que exportan e importan (comerciantes de dos vías) es aún mayor, en más de 20 puntos porcentuales.

Los comerciantes internacionales tenían más probabilidades de aumentar sus esfuerzos de digitalización como respuesta al COVID-19.

Un tercio de las empresas dedicadas al comercio interno invirtió para aumentar digitalización durante la pandemia, en comparación con el 40% de los exportadores e importadores.

Empresas en sectores que están más integrados en la economía mundial a través de las cadenas de valor tienden a ser más digitales. Los sectores manufactureros más digitalizados, tales como la fabricación de maquinaria y equipo de transporte y la fabricación de dispositivos electrónicos, es más probable que dependan de insumos producidos en el extranjero que los sectores menos digitalizados.

Es más probable que las empresas digitales hayan informado de importantes interrupciones comerciales desde el inicio de la pandemia.

Esto no es sorprendente, ya que las empresas dedicadas al comercio internacional es más probable que se vean afectados por interrupciones en las cadenas de valor globales, la logística, el acceso a materiales o nuevas regulaciones comerciales.

Sin embargo, este hallazgo se mantiene incluso cuando se toma en compromisos comerciales de las firmas de cuentas.

Es más probable que las empresas digitales tomen medidas para mitigar los efectos adversos de las interrupciones al comercio, ya sea diversificándose entre socios comerciales o buscando mercados.

Este hallazgo sugiere que la digitalización aumenta la resiliencia y la capacidad de adaptación capacidad de la economía ante grandes shocks económicos inesperados.

6.    IMPORTANCIA DE APOYAR LA DIGITALIZACIÓN

Gestionar con éxito la transición digital y aprovechar sus beneficios a largo plazo va más allá de la adopción de tecnologías.

La transformación digital es un cambio social.

Lograr el equilibrio tecnológico adecuado es un proceso complejo para la Unión Europea, que se encuentra atrapada entre los actores globales que definen la vanguardia de la innovación digital, las preferencias nacionales y los patrones sociales y regulatorios que establecen límites en el uso de las tecnologías digitales.

Los formuladores de políticas deben prestar la misma atención a las medidas destinadas a facilitar el uso de las tecnologías digitales y a las que abordan problemas potenciales, como la automatización de tareas.

Si bien las ganancias potenciales de productividad de las tecnologías digitales son grandes y no mantenerse al día con los desarrollos digitales es de alto riesgo, la digitalización presenta problemas potenciales para las industrias y las sociedades.

Para aprovechar al máximo la transformación digital, la Unión Europea deberá posicionarse bien en el entorno global, creando mejores condiciones internas para la innovación en tecnologías que son cruciales para los intereses europeos y ayudando a los trabajadores a mejorar sus habilidades digitales.

Dr. Alfredo Collosa

Junio 2.023