SE APROXIMA LA REUNION ANUAL DE LA INTERNATIONAL TRADEMARK ASSOCIATION
SE APROXIMA LA REUNION ANUAL DE LA INTERNATIONAL TRADEMARK ASSOCIATION
Por Dr. Roberto J. Porcel
Se acerca una nueva reunión de la International Trademark Association (INTA) que este año tendrá lugar durante el próximo mes de Mayo en Toronto, Canadá.
El destacado evento que reúne a propietarios de reconocidas marcas y alrededor de 7000 abogados de todas partes del mundo vinculados al tema de la Propiedad Industrial, es una oportunidad más que propicia para intercambiar experiencias de lo que ocurre en los distintos países con todo aquello relacionado a las marcas, sus derechos, registros y defensas, sus legislaciones y la metodología que se esta utilizando en el mundo para combatir la falsificación marcaria
Sin embargo, el elemento distintivo en esta ocasión, a diferencia de lo ocurrido en años anteriores, es la cada vez mayor importancia que se le va otorgando dentro de este marco, al tratamiento de la falsificación de marcas.
Así, en el Exhibition Hall, Metro Toronto Convention Center, habrá una sección enteramente dedicada al tópico de la falsificación marcaria, que contará durante todo el tiempo que dure el encuentro con expertos de todas las nacionalidades que por espacio de media hora cada uno disertará sobre las particularidades de este delito en sus respectivos países.
Es cierto que a la hora que me toque exponer y hablar sobre lo que ocurre en Argentina no podré hacer la apología de nuestra legislación al respecto; seguimos en deuda con lo comprometido en el Acuerdo TRIPs. No hemos tenido el reflejo necesario para adecuar la ley a los tiempos que corren.
Siempre insisto con lo mismo. En el año 1982, – la ley 22.362 data del año 1980-, el delito de falsificación de marcas involucraba en el mundo 5.5 billones de dólares; en el año 1993 esa cifra se elevó a 200 billones de dólares. Y en el año 2003, ascendió a 500 billones de dólares. Hoy esos números han superado la barrera de los 600 billones de dólares.
Sin embargo en la República Argentina, le seguimos adjudicando la misma atención que en los años 80. Si entonces no era mucha, – revísese la jurisprudencia desde su origen a la fecha-, hoy la atención no existe, es prácticamente nula. Al punto que las penas originalmente previstas se han visto aligeradas, llegándose incluso al punto de extinguirse la acción penal si se cumplimenta el beneficio que otorga la suspensión del juicio a prueba (lo que conocemos como probation).
De todas maneras, no es tiempo de derramar lágrimas por lo que no se ha hecho, sino de trabajar para revertir lo que no se ha actuado.
Por ello me entusiasma la oportunidad que se me presenta por delante de poder exponer, no solo frente a especialistas de todas partes del mundo en la materia, sino por ante los mismísimos propietarios de las marcas, que son en definitiva quienes deben alzar y hacer oír su voz en reclamo de una legislación moderna y justa, que se adecue a la nueva realidad y preserve sus derechos, los del consumidor y en definitiva los de la sociedad toda.
Dr. Roberto J. Porcel
Porcel & Cabo Abogados
Socio
Abril 2006
rjp@porcelycabo.com