La importancia del transporte marítimo en la economía del país –primera parte-. Por Antonio Zuidwijk
Argentina es un país potencialmente muy rico, pero con una vergonzante pobreza del 40% de la población.
Ha ido de crisis en crisis, siendo la presente la peor por el corona virus. El 10 de diciembre 2019 comenzó un nuevo gobierno que cómo primer paso, comenzó procurando y abordando el problema del hambre. Sin embargo, todavía no hay indicaciones, que el Gobierno, especialmente los funcionarios del Ministerio de Transporte se den cuenta que, setenta años sin una política de transporte ha causado graves problemas: DAÑARON LA ECONOMÍA.
LA falta de una política de transporte ha sido una de las muchas causas por las cuales Argentina ha ido de crisis en crisis. La otra es el sistema impositivo, que ha dañado la competitividad de nuestra marina mercante, importante parte de una buena política de transporte.
En estos momentos, los nuevos funcionarios deben prestar atención a lo que ha ocurrido durante estos setenta años SIN POLITICA DE TRANSPORTE.
Encontrarán muchas cosas que prueban que el tema merece su atención. En los años 50 Argentina era un país muy rico y tenía tanto oro que las cajas fuertes estaban llenas y se debían guardar las barras en los pasillos del Banco Central. Los bancos europeos pronosticaron que, en una década, Argentina estaría entre las 10 economías más importantes del mundo. En 1950 Argentina todavía tenía los remanentes de un excelente sistema de “puertos y ferrocarriles”, que había quedado de una buena política para dar concesiones para explotar ferrocarriles, lo que también se aplicaba en el sistema portuario, con dos excepciones: El puerto de Buenos Aires se formó como puerto federal y Santa Fe como puerto provincial, por ser un puerto muy importante en la exportación del país.
Pero el puerto mucho más importante para nuestras exportaciones, el Puerto de Rosario fue hecho con una concesión de una empresa privada, de capitales francesas, igual que los ferrocarriles que conectaron el puerto con su hinterland. Rosario llegó a ser considerado como el Chicago de Sudamérica.
Este buen sistema argentino, de “Ferrocarriles con Puertos”, fue una PRECOZ POLITICA DE TRANSPORTE, DE UNA ARGENTINA MUY COMPETITIVA. Pero cuando finalizo en 1943 esta excelente concesión, se inició un sistema que, en 12 años, las concesiones portuarias del país, caducarían.
Se terminó un sistema de operadores privados, que habían dado excelentes resultados y se estatizaron los puertos. En 1956 se formó la Administración General de Puertos y en 1963 se transformó la Junta Reguladora de Granos, en Junta Nacional de Granos, que se hizo cargo de los elevadores de granos y la carga de buques.
El Rio Paraná, la bendición de la naturaleza, permitió hasta los años 70/80 que los buques graneleros de aquella época podían cargar completo en Rosario, o casi completo, lo que se hizo después en radas en el Rio de la Plata.
Este sistema, para una zona de alta producción, tenía un buen ferrocarril y a solo 300 km un excelente puerto. Significó que la actividad fuera muy competitiva en el sistema mundial y pudo crecer muy bien.
Pero con el aumento del tamaño y calado de los buques, el Rio Paraná no fue tan competitivo y el deficiente dragado hecho por el Estado, causó cada vez más problemas. Los buques que comenzaron a cargar en Rosario, debían completar sus cargas en puertos de Brasil, con enormes extra-costos por las largas esperas en las radas brasileñas. Además de esto, con la estatización de los puertos y la falta de reglas de cómo podían “presionar” los gremios sus demandas, muchas veces excesivas, los puertos argentinos entraron en la clasificación internacional como categoría “puertos sucios”.
En 1986 durante el gobierno del Presidente Alfonsín, se formó CEMARFLU, un grupo de estudio para mejorar una Ley de Puertos de 1980 de un gobierno militar, que no se había originada en el Congreso y tenía partes muy discutibles. Esta acción de CEMARFLU, muy pronto fue acompañado por técnicos en la materia de CEDEPORMAR (justicialista) y después de poco tiempo, comenzaron a intercambiar ideas, que resultaron ser muy similares. Como resultado senadores radicales presentaron un proyecto de Ley de Actividades Portuarios, que no pudo pasar por el Congreso durante el gobierno de Alfonsín, pero que después fueron promulgadas en 1992 bajo el gobierno de Menem, como LEY 24.093, Ley de Actividades Portuarios. Ésta fue sin duda UNA LEY DE ESTADO Y NO DE UN GOBIERNO, y sus EXCELENTES resultados son claras muestras de la importancia que tienen el “TRANSPORTE Y PUERTOS” en la POLÍTICA DEL PAÍS.
Estos son sin duda los primeros puntos de análisis que deben hacer los nuevos funcionarios del Ministerio de Transporte. También deberán prestar mucha atención a dos temas que quedaron pendientes del gobierno anterior: La licitación del Plan de Modernización del Puerto de B.A. y la licitación de la concesión del dragado y balizamiento, con cobro de peaje de la vía navegable por el Canal Emilio Mitre, a partir de 2021. Ésta última licitación es la más importante de toda la historia argentina. Un día después de asumir como presidente, Alberto Fernández hizo el anuncio: la Hidrovía Paraná-Paraguay será gobernada por las provincias que la tienen y la usan. Es decir, Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe, Corrientes, Chaco y Formosa comenzarán a administrarla.
Este tema es muy complicado: El rio Paraguay-Paraná es un rio internacional, hay convenios firmados en el Mercosur y con “cartas reversales” firmada con Uruguay, y no es un tema para los 6 gobernadores, sino para el Congreso Nacional, cómo ya se aconsejó al gobierno saliente en enero 2019.
Argentina debe entender que esta licitación forma parte de la POLÍTICA DE TRANSPORTE que debe decidirse al más alto nivel y con la mayor atención, incluso del propio Presidente de la Nación. Para eso se deben ver los consejos que se hicieron en noviembre 2015 para las autoridades de ese momento; que no fueron atendidos y que han causado un atraso de 4 años en el posible crecimiento del país.
Sobre este tema se pueden encontrar muchos detalles en carta con inquietudes a las nuevas autoridades.
Más información en www.antonioz.com.ar .
Antonio Zuidwijk
Mayo 2.020