La revolución jurídica de la contratación automatizada – Dr. Lenis Vargas Badillo (desde Colombia)

La digitalización ha transformado radicalmente la manera en que las empresas y personas realizan transacciones comerciales. En este contexto, la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional (UNCITRAL) ha dado un paso clave con la publicación de la Ley Modelo sobre la Contratación Automatizada. Esta normativa sienta las bases para la validez y regulación de los contratos ejecutados mediante inteligencia artificial, sistemas automatizados y transacciones M2M (machine-to-machine), abriendo un nuevo capítulo en el derecho mercantil internacional.
El reconocimiento de la contratación automatizada como un mecanismo válido y exigible marca un punto de inflexión en la regulación de los negocios digitales. La norma establece que los contratos generados y ejecutados por sistemas informáticos tienen plena validez jurídica, incluso si no han sido revisados o intervenidos por una persona natural. Con ello, se eliminan barreras legales que antes dificultaban el reconocimiento de estos acuerdos en distintas jurisdicciones. En otras palabras, un contrato que se origine en una cadena de bloques o que se ejecute automáticamente mediante un software programado no podrá ser desestimado por el simple hecho de no haber contado con intervención humana en su ejecución.
Un Marco de Neutralidad Tecnológica y Seguridad Jurídica
Uno de los pilares de esta legislación es la neutralidad tecnológica, un principio fundamental que busca evitar que la regulación quede obsoleta frente a los avances en inteligencia artificial y automatización. En este sentido, la ley no exige el uso de un sistema o tecnología específica para la formación y ejecución de contratos, lo que permite que distintos modelos y herramientas sean utilizados sin generar discriminación legal.
La norma también reconoce la validez de los contratos cuyo contenido esté expresado en código informático. En otras palabras, si los términos de un acuerdo están escritos en un lenguaje de programación en lugar de una lengua natural, ello no afectará su validez ni su exigibilidad. Este es un avance significativo para los llamados Smart Contracts, ampliamente utilizados en el ecosistema blockchain para la ejecución automática de acuerdos sin intermediarios.
Además, la ley aborda la cuestión de la información dinámica en los contratos automatizados. Esto significa que un contrato podrá incorporar datos en tiempo real provenientes de fuentes externas, como precios de mercado, condiciones climáticas o tasas de cambio, sin que esto afecte su validez. Este punto resulta esencial para modelos de negocio basados en inteligencia artificial y big data, donde las condiciones pueden cambiar constantemente y los contratos deben ajustarse a dichas variaciones.
Responsabilidad y Atribución de Acciones Automatizadas
El uso de sistemas automatizados en la contratación plantea interrogantes sobre la responsabilidad de las partes en caso de errores, fallos del sistema o resultados inesperados. La Ley Modelo aborda esta cuestión estableciendo que las acciones realizadas por un sistema automatizado serán atribuidas a la persona que lo utilice para la formación o ejecución del contrato. De esta manera, se refuerza la seguridad jurídica al asignar responsabilidades claras en el proceso contractual.
Sin embargo, la norma también prevé escenarios en los que una acción automatizada pueda ser impugnada. Si una de las partes no podía prever razonablemente una acción ejecutada por el sistema, y la otra parte tenía conocimiento de esta imposibilidad, la acción en cuestión podrá ser desestimada. Este mecanismo busca equilibrar la automatización con la previsibilidad jurídica, evitando que errores inesperados generen consecuencias no deseadas para las partes involucradas.
Otro punto clave en materia de responsabilidad es la inexcusabilidad del uso de sistemas automatizados. La ley establece que una parte no puede eludir las consecuencias jurídicas derivadas de un incumplimiento contractual simplemente alegando que utilizó un sistema automatizado. Esto significa que, aunque la ejecución del contrato se realice sin intervención humana, las obligaciones y deberes legales siguen siendo aplicables.
Transparencia y Divulgación de Información
La regulación también impone exigencias en materia de transparencia. Las partes involucradas en la contratación automatizada no podrán omitir información relevante sobre el diseño, funcionamiento o uso del sistema que ejecuta el contrato. Asimismo, la revelación de información inexacta, incompleta o falsa sobre estos sistemas podría generar consecuencias jurídicas, protegiendo así la integridad de los acuerdos y fomentando la confianza en este nuevo modelo de contratación.
Este enfoque busca garantizar que todas las partes comprendan los mecanismos con los que operan los contratos automatizados y que no existan asimetrías de información que puedan generar perjuicios. En la medida en que estos sistemas sean utilizados de manera más extendida en el comercio global, la claridad y precisión en la información resultarán esenciales para evitar conflictos y garantizar la seguridad en las transacciones.
Un Paso Hacia el Futuro del Comercio Digital
La Ley Modelo sobre la Contratación Automatizada de UNCITRAL representa un avance significativo en la modernización del derecho mercantil. Su enfoque en la validación de contratos automatizados, la neutralidad tecnológica, la asignación de responsabilidad y la transparencia, le otorga un carácter innovador y adaptable a las nuevas realidades del comercio digital.
En un mundo donde la inteligencia artificial, la automatización y las transacciones electrónicas son cada vez más frecuentes, contar con un marco legal que brinde seguridad jurídica es crucial para la consolidación de estos modelos de negocio. Esta regulación no solo facilita la adopción de tecnologías emergentes en el ámbito contractual, sino que también proporciona a los Estados una herramienta flexible para su implementación en sus respectivos ordenamientos jurídicos.
El reto ahora está en la adaptación de esta normativa en cada jurisdicción y en la armonización de los distintos sistemas legales para garantizar una aplicación uniforme. A medida que las empresas y mercados continúan evolucionando, la legislación debe seguir su ritmo, asegurando que la automatización contractual se desarrolle en un entorno de certeza jurídica y protección para todas las partes involucradas.
Dr. Lenis Vargas Badillo.
Abogado y Profesor Universitario de Pregrado y Posgrado en derecho de las nuevas tecnologías, Derecho de la Propiedad Intelectual y Contratación.
Candidato a Doctor en Derecho aplicado a las Nuevas Tecnologías.
Magister en Derecho Comercial Nacional e Internacional, Contratación Internacional y Negocios internacionales.
Con cursos en profundización en Lenguaje de programático Python y JavaScript, React Básico (Start Coding), React Avanzado (Start Coding), Node.Js (Start Coding), Diseño y Despliegue de IA, Gobernanza de la Inteligencia Artificial, Gobernanza de Datos.